FLORES, MARIPOSAS


Por César Antonio Alurralde


Flores


Con la primavera habían llegado las primeras flores. La explosión de pétalos iluminó la casa sombría. Resultaba fácil observar la ausencia de mariposas libando su néctar, como también el zumbido alegre de las abejas y el trinar bullicioso de los pájaros.

Cuando trajeron la última corona de la Florería ya había partido el cortejo rumbo a su largo viaje sin regreso.



Mariposas

El sol bañaba la tarde dorando de luces la campiña. El follaje se derramaba en un torrente de esmeralda, mientras las flores esperaban pacientes sus mariposas que con las alas desplegadas posaban atravesadas por un alfiler, mostrando su mortal quietud tras el vidrio del cuadro.

FLORES, MARIPOSAS

Por César Antonio Alurralde


Flores

Com a primavera, haviam chegado as primeiras flores. A explosão de pétalas iluminou a casa sombria. Era fácil observar a ausência de mariposas sugando seu néctar, assim como o zumbido alegre das abelhas e o trinar agitado dos pássaros.

Quando trouxeram a última coroa da floricultura, o cortejo já havia partido rumo a sua longa viagem sem volta.



Mariposas

O sol banhava a tarde dourando de luzes a campina. A folhagem se derramava em uma torrente de esmeralda, enquanto as flores esperavam pacientes suas mariposas que, com as asas presas, pousavam atravessadas por um alfinete, mostrando sua quietude mortal atrás do vidro do quadro.
 
 
Tomado de Cuentos breves
 
Traduzido ao português por Angela Schnoorr